Adriana Ugarte como Julieta.

La película de Pedro Almodóvar se estrenó en España en abril, pero solo en esta semana lo hace en Latinoamérica. La película fue lanzada internacionalmente en el Festival de Cannes y estuvo en competencia por la Palme d’Or.

Es la primera película de Almodóvar desde Los amantes pasajeros (2013) y su primera gran obra desde La piel que habito (2011), ganadora del BAFTA a mejor película en lengua extrajera. Julieta se basa en tres historias cortas de la canadiense y Nobel de literatura, Alice Munro.

La trama es simple y una nueva muestra de la vertiente más naturalista de Almodóvar. Puede que sus películas más destacadas y reconocibles sean aquellas de trama más abstracta, con situaciones anormales de personajes surrealistas, pero su cine más íntimo constituye buena parte de su canon. Él la ha llamado una de sus ‘películas sobre mujeres’.

Una parte de su cine lidia con situaciones significativas de sujetos del común. Este es el caso: Julieta, representada por Emma Suárez, es una mujer de mediana edad, que pierde contacto con su hija, Antía (Blanca Parés), cuando ella abandona su casa a los 18 años. Enfrentada por el paso del tiempo, años sin saber de ella, decide dejarle un diario relatando las experiencias de su vida, con la esperanza de que ella pueda encontrarlo. La película sigue escenas significativas de su vida y de su relación con su hija.

Opinión general

Julieta ha tenido críticas mayoritariamente positivas, sin ser espectaculares. Es pensada como una interesante adición a la filmografía del español, pero no una piedra angular. Peter Debruge para Variety escribe: «Mientras Julieta representa un bienvenido regreso a la narración centrada en mujeres que le ha ganado a Almodóvar sus mayores loas, está lejos de más fuertes renegadas reformadas o sus trabajos más entretenidos».

Se ha destacado el tono intimista de la película, pero puede llegar a ser dramático hasta el extremo. De manera positiva Vicente Molina escribió en El País: «En Julieta la única naturaleza que interesa a Almodóvar es la del rostro humano como vehículo o máscara del alma en sufrimiento, por lo que los breves apuntes paisajísticos que se permite (sic)».

La cinta, que iba a ser la primera película en ingles de Almodóvar, se ubica en un punto medio entre las películas más formales del director, en que la estructura es más importante que la expresión, y aquellas que son más drama que otra cosa. Esto es lo que los críticos llaman ‘melodrama’, un uso muy diferente al que tenía en la antigüedad, pero denota un carácter lastimero de los personajes.

Cinematografía y dirección

No existen dudas sobre la capacidad de Almodóvar como director. Una de sus características es la versatilidad. Pasar de Todo sobre mi madre (1999) o La piel que habito (2011) a Julieta es un salto que la gran mayoría de directores no pueden hacer en toda su carrera. Sus películas femeninas suelen tener un mundo interior mucho más profundo que el de los hombres, más unidimensionales. Esto muestra el control del director.

Afiche de la película.

Peter Bradshaw de The Guardian afirma que la dirección logra su mayor brillo al encaminar la expresión emotiva de los actores. Por desgracia, la historia no va a ninguna parte. «Almodóvar es brillante en crear el tono de un thriller de misterio, pero con poca o ninguna intención de dar la gran revelación que se puede esperar».

Para Tim Robey de The Telegraph, por el contrario, esta es la gran virtud de la película. Las mujeres son el centro y el director deja «Es una de sus películas menos locas en términos narrativos, pero no puede llamarse tenue, porque el color y las texturas que extraen del nuevo director de fotografía, Jean-Claude Larrieu, son más intoxicantes que nunca».

Vicente Molina Fox, por otra parte, no ahorra elogios sobre los libretos de la cinta: «Se trata, a mi juicio, del mejor guion de Almodóvar en toda su carrera, un ejemplo de excelente trasvase cinematográfico de un material de alta calidad, diseminado en su origen y aquí unificado con pleno sentido, sin que en ningún momento la localización española de los escenarios canadienses de Alice Munro chirríe».

Conclusiones

La película Julieta es superior a Los amantes pasajeros, la última obra del director español. Durante este periodo, el que antecedió al estreno de la cinta, el apellido Almodóvar estuvo involucrado con la polémica de los Panama papers. Esto lo disuadió de promocionar su cinta de manera más extensa.

Más allá de las explicaciones que seguramente deberá darle al fisco español, Almodóvar es una figura sin igual en el cine español. Su obra habla por él y Julieta habla de su expresión más profunda. Un buen número de sus cintas exploran la figura de la mujer como sujeto atormentado por temas como el tiempo o la sexualidad. Su lucha con fuerzas superiores y como esto las transforma emocionalmente. Mientras el hombre es el sujeto de la acción, la mujer es la que la interioriza y la ejecuta a partir de su ser.

En esta lógica se circunscribe Julieta. La cinta se estrena el 7 de julio distribuida por Universal en Latinoamérica.