Adam Scott y Phil Mickelson, dos candidatos.
Todos sabemos cómo suele encaminarse la lista de favoritos para un ‘major’. Los ganadores de los últimos ‘majors’ son nombrados, más los múltiples ganadores. Alguien que haya tenido una temporada espectacular también puede incluirse, pero se requiere algo más para ganar un torneo de este tamaño. Emiliano Grillo ha tenido un gran año, pero no es suficiente para ser candidato.
En esa lista están los de siempre: Rory McIlroy, Jason Day y Jordan Spieth, la tripleta que siempre están en la lucha. Henrik Stenson y Dustin Johnson son elecciones fáciles porque se han quitado el peso de ganar su primer ‘major’ jugando un golf extraordinario. Johnson, especialmente, ha hecho un año de nivel supremo.
Como se estableció en un artículo anterior, el golf es el deporte más competitivo entre los deportes globalizados. Este año es la perfecta muestra, con múltiples ganadores por primera vez y contendores inesperados en cada ‘major’. Siempre hay sorpresas y siempre hay narrativas interesantes.
Siguiendo esta lógica, pensé en escribir este artículo, sobre los ‘otros’ candidatos. No lo digo de manera despectiva, pero obviaré un buen número de los favoritos naturales. Presento, entonces, mis candidatos a competir por el campeonato en el Baltusrol Golf Club.
La lista
Phil Mickelson: Ésta es la elección más ‘fácil’ que hago. Ganó en Baltusrol Golf Club en 2005 y está en un excelente momento. En cualquier otra circunstancia hubiera ganado en Royal Troon hace un par de semanas, pero Stenson era un hombre con una misión y nadie iba a quitarle su victoria. A diferencia del año pasado, su juego está en sintonía con la mentalidad ganadora. Su técnica de ‘putting’ basado en la sensación de golpe le está dando resultados. No ha ganado esta temporada, pero ha estado muy cerca en múltiples ocasiones. Seis Top-5 son dicientes.
Como mi jugador preferido, personalmente espero una victoria del ‘zurdo’.
Brandt Snedeker: Un gran 2015-2016 para el estadounidense. Uno de los mejores jugadores sin un ‘major’, en un año en el que cuatro jugadores (cuento a Day) se convirtieron en nuevos ganadores de los grandes torneos. Es quinto de la FedExCup. Tiene una victoria oficial (Farmers Insurance Open), una no oficial (Franklin Templeton Shootout) y un segundo puesto (Sony Open in Hawaii). En el Masters fue protagonista. Jugó muy bien en el RBC Canadian Open. Un momento ideal para Snedeker.
Justin Rose, un jugador consistente.
Justin Rose: Rose tiene un juego que brilla en los ‘majors’. Hace lo difícil, fácil y nunca parece tener problemas técnicos, en ninguna parte del campo. El ‘green’ no ha sido su fuerte en 2015-2016, pero no desentona tampoco. En el Masters y el Open fue protagonista, pero no ha tenido la consistencia necesaria. Pongo unas fichas a Justin Rose.
Adam Scott: Hasta marzo, la temporada de Scott era la mejor de todos los profesionales. Ganó el Honda Classic y el World Golf Championships – Cadillac Championship, dos de los torneos más importantes de la temporada en el PGA Tour. En quince torneos, no ha fallado un sólo corte. Su transición al ‘putter’ corto no ha sido tan traumática como se pensaba. Su problema: no ha hecho buenos ‘majors’ este año. Éste es su momento de brillar.
Jason Dufner: Dufner revitalizó su juego después de recuperarse de una lesión el año pasado y bajar de peso sustancialmente. Ya tiene un PGA Championship en su palmarés, lo que siempre es una ventaja. Ha jugado 22 torneos y sólo ha fallado tres cortes. Ganó el CareerBuilder Challenge y sus últimos resultados son buenos: tres Top-10 en sus últimos seis.
J.B. Holmes: Quince torneos en la temporada y sólo dos cortes no superados. Cinco Top-10. Un buen jugador de ‘majors’. Fue cuarto en el Masters y tercero en el Open. Esto muestra su capacidad para adaptarse diferentes campos, a pesar de ser caracterizado principalmente como un pegador largo.
Bill Haas: Hace un tiempo, Golf.com preguntó a los jugadores del PGA Tour cuál era el mejor jugador sin un ‘major’. Buena parte de ellos dijeron Bill Haas. Sus últimos torneos han sido muy buenos. En sus últimos cuatro torneos, ha conseguido tres Top-10, incluyendo su mejor resultado en un torneo grande, noveno en el Open. El problema es su pobre juego en los ‘majors’: jugó todos desde el Open de 2010 y sólo una posición en los diez primeros.