¡Qué gran año para el golf profesional el 2016! Como ha pasado desde el inicio de la década actual, ya no monopolizada por Tiger Woods, el profesionalismo es cada vez más competitivo y espectacular. El golf aficionado, por otra parte, no crece. Tema para otro texto.
Es el primer año desde 2011 en que todos los ganadores de major son nuevos. Todos ellos eran parte de la desafortunada lista de los mejores jugadores en no haber ganado un torneo grande. Danny Willett apenas entrando en ese conjunto, como el más joven de todos ellos y con cuatro triunfos en el European Tour.
Sin duda, los majors son lo más deseado por todos los jugadores y determinan el éxito de la temporada para los mejores profesionales. No determina la grandeza de una carrera, pero la mayoría de los mejores jugadores de siempre han ganado los grandes torneos que existían en su época. Desde Old Tom Morris hasta la actualidad. Entre las pocas excepciones, Colin Montgomerie, Dutch Harrison, Graham Marsh, entre otros.
En el último año, salieron de esta selección Jason Day, Danny Willett, Dustin Johnson, Henrik Stenson y Jimmy Walker. Todos ellos de manera espectacular, en especial Stenson y Walker. Estos tres últimos se quitaron un peso gigante de encima y esto es excelente para el juego. El torneo grande más difícil de ganar siempre es el primero. Esto significa que los próximos campeonatos tendrán un field lleno de ganadores de estos torneos.
Por desgracia, la lista de los mejores jugadores actuales sin victorias en majors sigue teniendo competidores espectaculares, aunque ahora es más corta. Y lo lamento profundamente, porque algunos de estos nombres merecen, con creces, un triunfo grande. Aunque no ganen, su carrera será envidiable, pero el decorado tendría mucho más lustre con el Masters, el US Open, The Open o el PGA Championship.
La lista en la que nadie quiere estar
Sergio García
Un talento brillante como pocos. Su carrera profesional empezó en 1999 y empezó ganando inmediatamente. Tiene más de 30 triunfos en todo el mundo, incluyendo once en Europa y nueve en el PGA Tour. Ha reinventado su carrera en más de un par de ocasiones y ha competido mano a mano con los mejores de este tiempo, incluyendo su ‘némesis’ Tiger Woods. Su mayor victoria fue en The Players de 2008.
Por desgracia, ha sido segundo dos veces en The Open, 2007 y 2014, y en el PGA Championship, 1999 y 2008. Si hubiera ganado ese primer Championship, sin duda tendría más de un par de majors en su palmarés. Su derrota más dolorosa fue en desempate ante Pádraig Harrington en The Open en 2007.
La ventaja de García es que es relativamente joven y está jugando en su mejor nivel de los últimos cinco años. A los 36 años, tiene al menos unos ocho años de buen golf por delante y su actitud ante el juego y la vida ahora es más madura. Tiene oportunidades, sin duda. El que más se merece un triunfo grande.
Matt Kuchar
Otro competidor de talento y nivel enorme. Otro, además, que ganó The Players pero no pudo subir al siguiente escalón. ‘Kuch’ es uno de los más queridos por el público, junto al supremo Phil Mickelson. Tiene carisma y amabilidad. Su palmarés incluye siete triunfos en el PGA Tour, aunque su progresión fue mucho más gradual que la de García y empezó a jugar con regularidad los major sólo desde 2010. Tiene siete Top-10 en estos torneos y estuvo cerca en el Masters de 2012, a dos golpes del ‘playoff’ final.
Kuchar tiene 38 años. Aún hay tiempo. Su nivel es relativamente homogéneo. Es uno de los más consistentes, incluso en los majors. Pasa los cortes constantemente, sin importar el campo. Su problema es el juego largo: su distancia del golpe es corta, sus estadísticas pegando approaches no son buenas. Eso no ha evitado que gané, así que posibilidades tiene.
Lee Westwood
En inglés existe la frase ‘nice guys finish last’ y buena parte de esta lista muestra que, a veces, es verdad. Pocas personas caben en esta categoría como Lee Westwood. Su carrera es envidiable, aún para los ganadores de majors. Consistente como pocos. Ha ganado en todos los continentes y tiene 23 consagraciones en el European Tour. Fue, además, número uno del mundo.
Debe ser uno de los jugadores más frustrados de la historia por no haber ganado un grande. Ha sido al menos tercero en todos los majors: dos veces tercero en el US Open, una vez en el PGA Championship, dos veces segundo en el Masters y una vez en The Open. Tal vez su mayor fiasco fue en el Masters de 2010: líder durante dos rondas y al final, derrota ante Mickelson por tres golpes.
Westwood tiene 43 años y pocos han podido ganar a su edad. Tiene el juego para hacerlo. Es más, fue segundo en el Masters de este año. Si alguien se lo merece, es Westwood.
Luke Donald
El caso de Donald sí que es enigmático. Su swing tiene una calidad que recuerda a Greg Norman y, en un buen momento, es intocable. Fue número uno del mundo por 40 semanas en su gran año, 2011, cuando se impuso en la lista de ganancias del PGA Tour y ganó la Race to Dubai del European Tour, el primero en hacerlo.
Sus mejores triunfos fueron en el WGC – Match Play y el BMW PGA Championship, dos veces. Sus peores años fueron parte del 2013 y el 2014, cuando cambió de entrenador de swing y su juego se derrumbó. En 2015 empezó a mejorar, después de retornar a Pat Goss como coach. Aun así, su juego no ha vuelto en plenitud. Este año fue segundo del RBC Heritage como mejor desempeño.
Su historia en los majors tiene dos terceros lugares (Masters 2005 y el PGA Championship 2006), un cuarto puesto (Masters 2011) y dos quintas posiciones (The Open 2009 y 2012). Una victoria de Donald en un major sería una gran sorpresa. Tiene el talento, pero su desempeño es muy inconsistente. Semanas buenas son seguidas por desastres. Es más, creo que él es el primero en descartarse como triunfador de los grandes torneos. Un gran jugador, con años de juego por delante, pero que ahora difícilmente se proyecta como ganador de un major.
Brandt Snedeker
Once triunfos en el PGA Tour y ganador de la FedEx Cup 2012. En 2014 parecía ir en decadencia, pero resurgió en los dos últimos años. Tras trabajar en su swing, ha vuelto a la solidez que lo caracteriza.
Fue tercero en dos ocasiones en los majors, en el Masters 2008 y The Open 2012. Augusta National siempre ha parecido un campo ideal para él, pero, por alguna razón, nunca termina de destacar. Con 35 años y mejorando constante tiene posibilidades a futuro.
Rickie Fowler
Incluyamos a un joven en este listado. Por ahora, no está apremiado por ganar un grande, pero tampoco puede pasar mucho tiempo sin que lo haga, para evitar que se convierta en un karma. Tiene todo lo necesario.
Es más, ha estado en pelea por los majors anteriormente y la presión no lo ha afectado. En 2012 fue quinto en el Masters, segundo en el US Open y The Open, y tercero en el PGA Championship. En esas oportunidades, simplemente fue superado por sus rivales, en otros grupos de juego, sin colapsar.
Este año no jugó bien ninguno de los cuatro grandes, pero siempre está en el radar.